Contenidos temáticos
- Verdaderas experiencias
- La integración de información interna y externa
- Los fenómenos psíquicos
- Los deportes
- La religión
- La reciprocidad
- La celebridad y el sexo
- La escasez
- Seguir a la manada
- La percepción del tiempo
- El desarrollo de la intuición
Desarrollo del tema
1. Verdaderas experiencias
¿Cuál es la naturaleza de la realidad? ¿Existe una sola realidad objetiva? ¿Acaso el mundo es una ilusión compartida o una masa de ilusiones que compiten entre sí? Algunas de estas cuestiones son filosóficas, pero otras ocupan el terreno más ambiguo donde la biología se encuentra con la filosofía y la experiencia. Los animales tienen diferentes sentidos: el halcón y la salamandra perciben esencialmente mundos distintos. Los humanos perciben el movimiento continuo cuando la imagen se mueve a 50 imágenes por segundo, pero las moscas no ven movimiento antes de las 300. Las personas no perciben los impulsos eléctricos directamente, pero los tiburones sí. Los humanos tienen una ventaja: pueden razonar. Esto les permite poner a prueba sus percepciones y distinguir entre la realidad y la ilusión. La “inteligencia de la percepción” (IP) se refiere a la forma en que la gente interpreta sus experiencias para distinguir entre la fantasía y la realidad. Los individuos tienen diferentes niveles de IP, una habilidad que se puede desarrollar a través de la práctica concienzuda. Así, podrá cambiar la forma en que ve el mundo.

2. La integración de información interna y externa
Las personas reaccionan de manera distinta ante la misma situación. Cómo ven el mundo depende de sus mentes y la interacción entre sus cuerpos y mentes. La IP tiene dos aspectos: primero, la percepción, o la reunión de datos brutos sobre el mundo; y segundo, la interpretación.
El cuerpo transforma cada sensación en una señal electroquímica y la envía al cerebro, donde se procesa y organiza la información. El cerebro nunca se enfrenta a las sensaciones de manera aislada, sino que aplica modelos mentales para clasificar y evaluar la información más rápidamente. Hay mucho que desconocemos del cerebro; por ejemplo, cómo integra sensaciones externas, como la vista y los olores, con otras percepciones autogeneradas.
La buena salud depende de esta integración. La gente puede padecer dolor, solo para que los médicos lo descarten como algo que está en su cabeza. Las personas pueden padecer de hipocondría y generar una ilusión convincente de enfermedad. Algunas personas usan su marco mental para ayudarse a sanar a través del mindfulness y cambiar su enfoque y su manera de reaccionar al estrés o la enfermedad.
Las experiencias negativas generan emociones intensas, lo que lleva a las personas a reaccionar pobremente a temas de salud. Internet alimenta una IP tanto negativa como positiva, por lo que ofrece tanto información útil como reportes de amenazas a la salud exagerados.
3. Los fenómenos psíquicos
Algunas personas son escépticas de los fenómenos psíquicos. En ocasiones algunas personas que han sentido que no pueden moverse cuando duermen crean historias sobre visitas alienígenas para explicarlo. Sin embargo, la parálisis del sueño, una condición física, puede contribuir a esas experiencias en las que el cerebro tiende a construir historias para explicarse experiencias vívidas, como puede ser un sueño oscuro pero lúcido.
Su IP determina cómo se enfrentará a tales ilusiones. La gente con baja IP las aceptan. La cuestión de la vida después de la muerte reta a la inteligencia de la percepción. Los factores sociales, como la religión, junto con los relatos de personas de experiencias cercanas a la muerte, fomentan la especulación.
Estas experiencias comparten elementos, como ver una luz brillante o atravesar un túnel. El cerebro permanece activo durante un breve momento después de que el corazón se detiene, lo que puede explicar algunas de estas ocurrencias. Los estudios sobre la muerte y morir muestran que la cultura de un paciente da forma a otros elementos de esta experiencia. Ya que el cerebro parece incapaz de procesar información en este proceso, cuando revive, le da nueva forma a experiencias reales. Esto añade una nueva capa de interpretación entre la experiencia y la comprensión. Para evitar la ilusión, ponga énfasis en la parte de la “inteligencia” de la IP: activamente evalúe sus experiencias. Quienes no lo haga podrían crearse desilusiones sobre sí mismos y el mundo.
4. Los deportes
La inteligencia de la percepción juega un papel importante en el atletismo, y empieza en un nivel básico: que la gente se levante del sillón y haga ejercicio.
Hacer ejercicio para libera endorfinas, lo que hace que el cerebro funcione mejor. Los miembros de un equipo necesitan una IP alta para jugar mejor, ya que su IP determinará qué tanto son compatibles con sus compañeros. Los atletas visualizan su máximo desempeño para mejorar su ejecución. Hablan de “estar en la zona”, un estado mental en el que el pensamiento consciente desaparece y simplemente actúan. Cuando esto ocurre en equipo, los atletas interactúan con tanta fluidez que parecen leer sus mentes. Las actitudes son contagiosas: cuando un jugador lo hace bien, el buen desempeño se propaga en el equipo.
5. La religión
Los devotos religiosos suelen estar dispuestos a pagar grandes cantidades de dinero como símbolo de su fe. Los no creyentes ven en esto un ejemplo de pareidolia, una condición mental que deforma la IP de la gente y les provoca ver detalles ambiguos como algo específico, lo que sugiere que la religión puede dar forma a las percepciones.
Algunos creyentes creen tanto en la imaginería religiosa que están predispuestos a ver imágenes de lo divino donde la realidad solo muestra formas. La incapacidad de discernir imágenes muestra una baja IP; discernirlas indica una alta IP.
6. La reciprocidad
La inteligencia de la percepción se ve afectada por las acciones de los demás. Si alguien le hace un regalo, la reacción que el gurú del marketing Robert Cialdini llama el principio de reciprocidad entra en acción: se sentirá obligado a darle a esa persona un regalo en retorno.
Pero cuando la gente no puede retribuir en igualdad, se siente en deuda. Esto se relaciona con la tendencia de ceder o cambiar posturas cuando otros en una situación hacen concesiones, incluso si uno fue el primero en hacerlo para empezar. La gente busca el equilibrio y tiende a actuar para balancear las básculas que percibe. Pero la reciprocidad tiene un lado oscuro: las personas buscan venganza si se sienten ofendidas. Las tendencias hacia la reciprocidad suelen relacionarse con la culpa.
Algunos estudios en infantes muestran tendencias innatas de ayudar al prójimo; otros muestran que los niños basan su forma de tratar a los demás en pistas sociales tomadas de su entorno.

7. La celebridad y el sexo
A las personas se les suele dificultar interpretar claves sociales correctamente, y tratar con una persona famosa amplifica el problema debido a la manera en que la cultura contemporánea y los medios sociales multiplican el poder de la celebridad. Los programas televisivos conocidos como realities, los medios sociales y la posibilidad de publicar autorretratos, las selfies, crean la ilusión de que los fans pueden conectarse directamente con sus ídolos. Las celebridades, por su parte, caen víctimas del “efecto halo” en el que la fama les da amplia influencia, incluso en áreas fuera de su competencia. El sexo cambia la IP. La cultura y la tecnología actuales multiplican estos efectos. Cerca del 30% del tráfico de internet contiene pornografía; la mayoría de los hombres la ven con regularidad, al igual que muchas mujeres. Esto provoca que se les dificulte discernir entre actividades sexuales aceptables y las que no lo son.
8. La escasez
La escasez puede distorsionar su IP. Esto es cierto en cuanto a bienes preciosos como el oro, o una taza de US$100 de café kopi luwak, hecho de granos que han pasado por el sistema digestivo de una civeta de Asia, que es una especie de cruza entre un lémur y un mapache. La atracción es generalmente más fuerte hacia lo prohibido, como ocurre en Romeo y Julieta. Las personas pueden ceder ante tal atracción en el momento y después justificarse o reprenderse. La gente fuera de sus contextos conocidos puede carecer de juicio. Por ello los turistas regresan tanto con recuerdos invaluables como baratijas. Enfrente este dilema al crear un obstáculo, como pedirle a su amiga que le guarde su dinero.
9. Seguir a la manada
La presión social afecta la IP. Las personas con una IP elevada analizan las acciones de los otros en busca de pistas sobre su forma de proceder o sobre si deberían separarse del grupo. Aquellas con una IP baja imitan a los demás sin hacer juicio alguno. Seguir las acciones de otros en lugar de su propio razonamiento debilita su IP. Tener una postura sólida está bien, como lo es tratar que la gente adopte sus perspectivas. Sin embargo, algunas personas creen que solo sus opiniones son válidas y que cualquiera que difiera está mal o es inmoral. Este fanatismo puede llevarlas a ser violentas. Individuos que han sido educados sin estabilidad o que han sufrido un trauma emocional pueden tener una IP baja y ser vulnerables a influencias externas. Aun las personas que han sido educadas en entornos sanos pueden pasar por momentos cuando sean más vulnerables al fanatismo. Los líderes de sectas lo saben y se hacen de nuevos miembros al abrazarlos con apoyo. Los conversos abandonan las expectativas del mundo exterior, como las de sus padres o maestros. Los líderes les lavan el cerebro a los nuevos miembros con la ideología de la secta de forma que dejan de tener bases para separar la realidad de la fantasía. Este tratamiento reduce la IP a un nivel tan bajo que creen que solo existen dentro de la secta.
10. La percepción del tiempo
No es fácil juzgar el tiempo. Investigaciones muestran que el cerebro humano con frecuencia se equivoca en su percepción del tiempo. Juzgan la duración de un periodo de manera distinta según su edad: los más jóvenes quizás no puedan juzgar el paso del tiempo en absoluto porque aun no forman recuerdos, que son un elemento fundamental para juzgar el tiempo. Entre los adultos, los mayores tienden a ser los peores para calcular el tiempo y lo perciben como si pasara más rápido que en realidad lo hace.
Esto se puede deber al efecto psicológico que tiene el envejecer –como la sensación de que queda poco tiempo– o a efectos biológicos, como cambios en la química del cerebro. Los factores contextuales y culturales afectan la habilidad de calcular el paso del tiempo: ser criticado durante 10 minutos puede parecer más largo que hacer el amor por 10 minutos. Diferentes periodos históricos y zonas del mundo tienen diferentes expectativas de vida, lo que genera diferentes presiones de tiempo.

11. El desarrollo de la intuición
Muchas personas creen que sus corazonadas las guían. Estos mensajes son intuición y todos los experimentamos. El reto es entender y descubrir qué hacer con ellos. Los sentimientos intuitivos no ofrecen una justificación racional.
Las personas usan la intuición para referirse a dos conceptos:
- Destellos potencialmente sobrenaturales y certeza, y
- Percepciones científicamente validadas. Las personas con una IP alta saben cuando hacer caso de estos sentimientos. Aquellas con una IP baja desechan las advertencias de la intuición. Preste atención a sus señales interiores.
- Analice momentos cuando haya ignorado su intuición. Piense en sus sentimientos como evidencia de la conexión estómago-cerebro. Las personas pueden desarrollar la intuición si realizan actividades en las que hay que tomar muchas decisiones o hacer muchas evaluaciones. Un entrenador con experiencia o un inversionista toma buenas decisiones rápidamente sin que necesariamente pueda explicarlas.